Margari Gómez Gordillo, nueva emprendedora propietaria de El Mentidero

Paseando por nuestro centro, sin destino fijo me dejé guiar por mi intuición y así sin pretenderlo me hallé en el número 3 de la calle Capitán Cala, jamás me arrepentiré de ello…

Paseando por nuestro centro, sin destino fijo me dejé guiar por mi intuición y así sin pretenderlo me hallé en el número 3 de la calle Capitán Cala, jamás me arrepentiré de ello.

Allí conocí a Margari Gómez Gordillo, una mujer de 47 años y que la providencia ha permitido que sea la nueva propietaria del bar EL MENTIDERO. Para quienes pensaban que este establecimiento había cerrado sus puertas, se han equivocado, sólo se tomó un descanso y ha vuelto a resurgir con savia nueva, pero con la misma esencia.

Para Margari, esta empresa no es desconocida, trabajó más de tres años en sus inicios en la cocina, lo conoce perfectamente, sabe el gusto de los clientes, de hecho ha rescatado antiguas tapas que ya estaban descatalogadas. Esta mujer valiente, que resurge a cada instante como el Ave Fenix, no lo dudó ni un instante, en el mismo momento que se entera que cerraban el Mentidero llama a Manolo Suarez (antiguo propietario y fundador del mismo) quien no tuvo la menor duda de que ella sería la persona más capacitada de continuar con su legado.

Y así comienza esta nueva etapa para esta emprendedora intrépida, creadora de puestos de trabajos, y a quién no se le cae los “anillos para sacar a su familia para adelante”.    Cuenta con apoyo incondicional de sus hermanos e hijos. Tiene una gran experiencia en restauración, desde sus inicios en el Mentidero, pasando por la cafetería de Procavi, así como en el bar Latino del Eroski. Y qué mayor aprendizaje y garantía que la propia experiencia. No es solo todo esto, sino que, hay algo especial en ella, un aura que la envuelve, es su sonrisa, es su mirada, no lo sé pero te cautiva y te transmite la confianza de que estas en un lugar seguro.

El Mentidero no es sólo un bar en el que hay buen vino y buena cocina, sino, es un lugar para la cultura, para el arte y para el flamenco, allí todo artista puede exponer de forma gratuita su obra se dan conciertos de flamenco, recital de poesías, etc.

Actualmente se hay desayunos, así como menús diarios a precios muy económicos, sus puertas están abiertas de lunes a sábado desde por la mañana hasta la noche.

Sin duda alguna es un sitio con “duende”.